Cuidaito, que pincha!! |
Para cogerlas debemos tener cuidado de que no estén junto a un camino donde pasen muchos perros, porque dejan sus necesidades donde menos nos lo esperamos, o al lado de un prado donde hayan echado estiércol recientemente (como pasa en Suiza sobre todo en primavera, que todo el país está invadido de pestilencia, y por mucho que la naturaleza invite a disfrutar, el mero hecho de abrir la puerta de la casa y recibir en toda la cara la bofetada fétida de la mierda que los granjeros no saben dónde meter después del invierno, me echa para atrás, y me quedo en mi casa practicando el "sano" deporte de escribir recetas en el blog, con lo bien que estaría danzando por el campo, cogiendo hierbecillas y respirando aire puro..., pero no, los suizos quieren comer mucha carne y mucho queso, y esto es lo que hay, mierda por un tubo, o mejor dicho, por muchos tubos, porque la esparcen con una máquina que tiene muchos tubos y está acoplada a un tanque llenito de mierda líquida hasta el borde).
Bueno, pues si no os he quitado las ganas de comer, vamos a la receta (sorry, pero es que aparte del pestazo, es que me pone de muy mala leche, por la ordinariez de llenarlo todo de mierda y por el origen de esa mierda: las ansias de carne y queso, la inconsciencia respecto al daño mediambiental y al sufrimiento animal).
La ensalada de atrás es de patatas con dientes de león, rica, rica y muy sana |
Y vamos a la tortilla:
400
gr ortigas frescas (aprox.)
Aceite
de girasol
2
dientes de ajo
½
taza de harina de garbanzos
½
taza de agua
Sal
Vinagre
Cocemos
las ortigas en una cacerola tapada con un poco de agua y sal. Cuando estén
tiernas (reducirán mucho el volumen, es como con las espinacas) las escurrimos.
Rehogamos
los ajos picaditos en una sartén, añadimos las ortigas y seguimos rehogando
removiendo de vez en cuando.
En
un cuenco mezclamos la harina de garbanzos con el agua, un poco de sal y un
chorrito de vinagre (sin pasarse, es sólo para amortiguar el sabor a garbanzo).
Incorporamos las ortigas y mezclamos.
En
una sartén antiadherente echamos un poquito de aceite, cuando esté caliente
repartimos la mezcla de ortigas y dejamos cocer a fuego medio durante un ratito,
de vez en cuando movemos la sartén horizontalmente para que se despegue la
tortilla. Luego colocamos un plato llano encima (o un vuelve tortillas) y le
damos la vuelta. Con cuidado volvemos a poner la tortilla en la sartén para que
se haga por el otro lado.
Una
vez lista se come calentita acompañada de tomate a rodajas o una buena salsa de
tomate.
Rezept auf Deutsch:
ca. 400 g Brennnessel
Sonnenblumenöl
2
Knoblauchzehen
½ Tasse
Kichererbsenmehl
½ Tasse
Wasser
Salz
Essig
Brennnessel
gar kochen und abtropfen. Knoblauch fein hacken und in etwas Öl dünsten. Brennnessel
dazugeben und mitdünsten. Mit Salz abschmecken.
Kichererbsenmehl
mit Wasser, ein Schuss Essig und etwas Salz gut rühren. Brennnessel unterheben
und alles gut mischen.
In einer
antihaftbeschichteten Pfanne etwas Öl (wenig) geben. Wenn das Öl heiß ist, die
Mischung darauf verteilen und bei mittlerer Hitze kochen (ab und zu die Pfanne
hin und her bewegen). Mit einem Teller (am besten mit einem speziellen Holzteller
für Omeletts) das Omelett vorsichtig umdrehen und wieder auf der anderen Seite
in die Pfanne geben und kochen lassen.
Dazu passt
sehr gut eine Tomatensoße oder rohe Tomaten in Scheiben.
Hola Rocío!! Me alegra un montón ver que estás de vuelta en el blog con energía. Tengo unos cuantos artículos para leerme ¡que bien!
ResponderEliminarEsta tortilla tiene una pintaza, nunca se me había ocurrido hacerla con ortigas y no será porque aquí no haya ortigas bastantes, jeje...
Un besote grande!!!
Celia ^_^
Hola Celia!! El blog lo tengo algo abandonadillo, pero a ver si encuentro tiempo en verano y le dedico más tiempo.
EliminarCon ortigas se pueden hacer cosas maravillosas y no hace falta que te diga sus propiedades. Nosotros incluso las tomamos en licuados, pero también la uso como las espinacas: con garbanzos, con bechamel, rehogadas, lo que te dé la imaginación. Por cieto, que me ha gustado mucho tu post sobre las hierbas de San Juán, me paso a dejarte un comentario y luego me voy al campo a coger ortigas, je, je...
Un besote!!